21:25 Comment1 Comments

Yo sé que te va a parecer una boludez, pero el tema es cierto y es así: No, no quiero estar más con vos, y sí, fue por lo del papel higiénico. Sí, ya sé, ya sé que para vos es una huevada, y tenés razón cuando me decís que es solamente un puto papel higiénico; pero me parece que no es tan así. Terminás el papel higiénico y no lo cambiás, dejás el tubo de cartón puesto. Bueno, sí, tenés razón, pero es precisamente eso, los rollos están ahí, al lado, y no lo ponés.
¿Es un principio de autismo? ¿Sentís la piel desgarrarse cuando agarrás el nuevo rollo? ¿cuando desencastrás el traconómetro y atravesás el aire del tubo por su cento? No, no es eso. No me gusta hablar escatológicamente, pero lo voy a hacer. ¿Cómo querés que esté con alguien que no se hace cargo de su propio culo? No quiero encontrarme esas hipocresías. Si tu culo fatigó el papel higiénico, entonces reponelo, no me dejes ese cartón vacío humeante, contándome de todos los papeles higiénicos que no reponés, el de tu inseguridad, el de tu histeria y tus celos. El Sussex de tus enojos, que gastás a mansalva, sin pedirle disculpas al traconómetro cargándolo de un rollo nuevo, de una llamada por teléfono diciéndo "me fui al carajo, perdón", de un mensaje, de una nota (de una carta, que los correos no cerraron y encontrarte en el buzón, en tu letra, es tanto diferente de esta Courier New de taquígrafa silenciosa). "Te quiero, a veces me olvido, curtite".

Sí, será una boludez, pero no quiero. Y sí, quizás sí ví mucho Seinfeld, pero si no podés hacerte cargo de lo que hace tu culo: la puerta, bonita...

Ojete mutis por foro.

1 comentarios:

María Macarena dijo...

Mi favorito, claramente. Los años pasan y mis gustos permanecen intactos.

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